mayo 26, 2021

En el pogo

Por Andrés Gauffin
Puede ser una imagen de Jose Antonio Aramayo

En honor a José Aramayo, periodista, con quien conversé hace un par de semanas sobre estas cosas, café de por medio, y hoy seguro que se está riendo de mis líneas. ¡Chau chango!

Advertencia: este artículo puede herir su sensibilidad democrática. Pretende mostrar que los comicios convocados para el próximo 4 de julio -ahora suspendidos- no iban a ser más que una nueva ficción electoral, sustentada en la destrucción de los partidos y su reemplazo por un oculto sistema para conservar el poder de los mismos de siempre y, como siempre, ningunear a los de abajo.

Sede del Juzgado Federal Electoral

-¿Que cuándo el PJ hizo su última elección interna para elegir congresales provinciales?

– Eso mismo.

– Espéreme un momento.

La mujer abre una de las dos altas puertas de la oficina de «Partidos Polìticos» del juzgado federal electoral y se interna para pedir instrucciones frente a una pregunta que aparentemente nunca le habían hecho.

Faltan pocos días en Salta, mayo de 2021, para que los partidos políticos y frentes oficialicen sus candidaturas a diputados, senadores, concejales, y nada menos que a convencionales que debían reformar, según la voluntad del gobernador Gustavo Sáenz, la Constitución para limitar el mandato el gobernador y hacer eterno el de los jueces de Corte.

A los costados del pasillo del ex edificio del Correo, planta alta, algunas fichas se asoman por los cajones de los muebles metálicos fabricados en los años 70, donde alguna vez se llevó el registro de afiliaciones a los partidos.

 La mujer vuelve, con instrucciones precisas de funcionarios de saco y corbata.

– No, mire, eso se lo tiene que pedir al mismo partido.-

– ¿Pero ustedes no llevan un control de las elecciones internas de los partidos?

– … ,(con cara de póker) 

Ley de Partidos Politicos, art. 3:

La existencia de los partidos requiere la siguiente condiciones sustancial:

– Organización estable y funcionamiento reglados por la carta orgánica, de conformidad con el método democrático interno, mediante elecciones periódicas de autoridades y organismos partidarios, en la forma que establezca cada partido, respetando la paridad de género, sin necesidad del cumplimiento estricto del principio de alternancia.

Pero yo, que me las doy de saber todas las mañas de la investigación periodística, vuelvo unos días más tarde con un una nota en papel para que me reciban el duplicado con fecha y sello y me la tengan que contestar, sí o sí. Caramba.

– No, señor, con la pandemia hemos dejado de recibir notas por escrito, contesta la misma señora, una semana después, esta vez con cara de truco.

– Pero si usted quisiera -agrega después de otra vuelta por los funcionarios de adentro-, puede hacer la consulta al correo jfsalta1.secelec-parpol@pjn.gov.ar-

La dirección  correo es así de sencilla para que cualquier afiliado pueda recordarlo y hacer sus consultas al toque. La única cuestión, si pudiste memorizar el jeroglífico, es que no te contestan.

PJ

-¿Una consulta sobre las últimas elecciones de congresales del partido?

Me repreguntan, unos días más tarde, en Zuviría 938, sede del Partido Justicialista.

– Sí, me dijeron en el juzgado electoral que lo pida aquí.

La sede del PJ Salta luce onda vintage, como que uno, mirando el frente del edificio, se retrotrae a los años 50, aquellos tiempos, no cuando Perón gobernaba, sino cuando el empresario Roberto Romero, favorecido por el golpe militar que derrocó a Perón, comenzó a apoderarse del diario oficial del partido, llamado El Tribuno.

El pasillo fue techado con unos policarbonatos a dos aguas,  para la época en que Juan Carlos Romero, hijo de don Roberto y ya gobernador de Salta, se apoderaba del PJ. Corría el 96 o 97.

Romero, Juan Carlos, le había encargado a un pariente polìtico, de apellido Aleksandrowicz, la remodelación de la vieja casona. El arquitecto explicaba por entonces que su idea había sido significar la transparencia de la democracia y el partido con los vidrios y los policarbonatos que había dispuesto en el reciclado.

Pero la tierra asentada sobre el policarbonato-techo hace sospechar que, en los 25 años que han transcurrido desde entonces, ninguna autoridad partidaria ha dispuesto su limpieza. Si alguien mirara desde arriba del techo hacia el pasillo, todo se le aparecería borroso y oscuro.

-Aahhh, mmmm, sí, ya va a venir la gente de Isa (Miguel, el presidente del PJ, electo por el Congreso)… pero mejor me llama dentro de una hora y le digo.

Una hora ocloc después disco al 4313470.

-Hola, sí, soy el periodista que estuvo recién….

-Aahhh, mmmm, sí, no ha venido la gente de Isa…

-Listo, yo le dejo mi correo, déselo a quien me pueda dar algún dato sobre las últimas  elecciones para elegir autoridades partidarias.. Que me escriba, yo le hago un par de preguntas y nada más…

Algunos días después abro mi casilla para recibir los correos de la gente de Isa, pero se vé que todavía no han venido.

Según la Carta Orgánica del Partido Justicialista, los afiliados deben ir a elecciones internas para determinar quiénes serán los candidatos del partido en un comicio general, como los que se iba a hacer el 4 de julio. Pero los congresales del partido -también electos por los afiliados cada cuatro años- podrian elegirlos también, en caso de necesidad y urgencia.

UCR

– ¿Datos sobre la última elección de convencionales?, me devolvió la pregunta el único hombre que había, claro, en esa soledad tan inmensa o si prefieren esa inmensidad tan sola, a las cinco de la tarde, de la sede del radicalismo, Mitre 653.

-Sipi, le contesté. Quise caerle simpático.

Es preferible entrar apuradito a la sede de la UCR Salta, no sea que se termine de caer sobre tu cabeza el cielorraso del pasillo de entrada. Seguro, ningún arquitecto vino a remodelar la vieja casona desde los años ochenta, cuando Alfonsín gobernaba en la Casa Rosada. Al fondo te espera una antigua y colorida mampara, nada más que muchos de sus vidrios se rajaron y otros han desaparecido.

Se ve que la viuda de un viejo dirigente radical donó los últimos muebles que le quedaban, pero no los de su finado marido, sino las de su propia madre, tan viejos y deteriorados se ven.

Es más fácil encontrar una foto de Balbín en la pared del salón principal, que una de Alfonsín, advirtió Gofín.

-Aahhh, mmmm, sí, ya va a llegar de viaje el Chato (por Rubén Correa, electo hace unas semanas presidente del comité capital), y lo va a llamar.

En casa me siento a tomar mate hasta que virbre el celu. Y espero y espero, lo caro que está la yerba.

Los convencionales de la UCR equivalen a los congresales del PJ y deberían cumplir la misma misión.

Nadie ha tenido, en el partido símbolo del renacer de la democracia en Argentina, la gentileza de informar qué método democrático usaron para que participen los adelante radicales, en la elección de sus candidatos para el 4 de julio. ¡Atrás radicales!

De nuevo el PJ

Cuando por el 2009, el entonces gobernador Juan Manuel Urtubey se apoderó del PJ, logró convocar a un congreso que reformó la carta orgánica del partido. Creó la Comisión de Acción Política (CAP),  que concentró todas las decisones y convirtió en decorado democrático al Consejo y el resto de las autoridades partidarias.

Un reciente, digital y también supuesto Congreso partidario facultó a la CAP -que pronunciaría tan bien Marcos Mudstock- a decidir quiénes serán los candidatos a convencionales constituyentes para las elecciones del 4 de julio.

Hasta hace un mes, el sitio del PJ mostraba una lista de congresales que supuestamentele dieron a la CAP las facultades de elegir antidemocráticmente a quienes serían candidatos del partido nada menos que para reformar la Constitución de Salta. Pero sólo figuraban los nombres, nunca el período para el que habían sido electos.

-Adrianita (Pérez), ¿como estás? ¿podrías decirme cuándo fuiste elegida congresal del PJ? le pregunté en su muro, a  donde se precandidatea a algún cargo legislativo por capital, cada vez que se acerca algún comicio.

Y me senté a tomar mate y esperar. Con lo caro que está la yerba.

Digamos que los futuros convencionales constituyentes del PJ que, por esa vocación tan democrática del gobernador Sáenz, iban a limitar temporalmente los mandatos de gobernador y legislador, han sido pre seleccionados por congresales que posiblemente no recuerdan cuándo han sido electos, tan ilimitados e ilegítimos son sus períodos.

Y ahora mismo no sé si reír o llorar.

Agarro el diario El Tribuno, y leo la enésima nota del Chiqui Pereyra o de Martín Rodríguez, informando muy seriamente de cómo en las internas de los partidos y los frentes se hablaba, se dialogaba, se discutía, se debatía, y se consensuaba para decidir candidaturas.

Y el «se» sólo esconde partidos más viejos, oscuros y vacíos que sedes del PJ y la UCR a las cinco de la tarde, donde álguienes, no sé muy bien quiénes, que nunca se han molestado a entrar a una sede partidaria por más de una hora, ni a debatir ni a dialogar, ni quizás a afiliarse, decidieron quiénes se iban a prestar a la fantochada saencista  de la reforma de la Constitución para limitar el mandato del gobernador, pero a eternizar a los jueces de Corte en sus poltronas.

Todo decorado por un carnaval de partidos sellos, más falsos que yo emocionándome con Los Nocheros y que mediciones de raiting de FM profesional encargadas por Martín Grande, en donde lo que vale por supuesto no es el voto de las afiliadas Sarapuras del PRO de San Antonio de los Cobres -si las hubiera o hubiese-, sino la última foto que me saqué en Buenos Aires con Macri o Fernández, o con Kevin Benvídes en el Centro Municipal, vaya decadencia.

¿A esto ustedes llaman democracia?, pensé preguntarle a la señora cara de póker de la Justicia Electoral. Pero no quería sentarme a esperar, ya saben ustedes lo cara que está la yerba.

Preferí prender mi vieja radio de los 70. No va que de  una escucho el comienzo intempestivo de La marcha de la Bronca y cuando Pedro y Pablo comienzan con el estribillo «No puedo ver, tanta mentira organizada….», no les puedo contar las ganas que me dan de hacer un pogo. Si hasta lo siento al Pepe Aramayo saltando a mi lado.